3Dtive, el futuro de la impresión 3D en el sector dental
3Dtive, el futuro de la impresión 3D en el sector dental
Adrián Martínez (29) y Álvaro Troyano (29) son dos amigos de la infancia que han vuelto a unir sus caminos para desarrollar un proyecto que desemboca en la creación de 3Dtive, una empresa madrileña con mucho que aportar en el campo de la impresión 3D con perspectiva nacional e internacional.
Definen 3Dtive como un espacio donde la ingeniería y el sector dental confluyen para “hacer más accesible y universal la integración de los nuevos métodos digitales en laboratorios y clínicas”. Estos dos emprendedores pretenden poner su amplio conocimiento a disposición de las personas interesadas mediante diferentes formaciones prácticas que potencien la experiencia en primera persona.
“Queremos compartir los conocimientos de dos profesionales jóvenes que tienen ganas de entrar en un sector obligado a entenderse con las tecnologías de fabricación aditiva”, afirma Troyano.
Sobre el equipo 3Dtive
Troyano y Martínez se definen como “accesibles, reales y precisos”. El primero, trabaja en Laboratorio Dental Troyano, una empresa familiar con más de 35 años de experiencia en el sector. Además, es colaborador activo en el Máster de Nuevas Tecnologías de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y en la Universidad Europea.
Por su parte, Martínez es ingeniero industrial por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), donde actualmente cursa un doctorado y destaca por su experiencia profesional en distintos proyectos de investigación europeos relacionados con el desarrollo de tecnologías de fabricación aditiva para satisfacer aplicaciones biomédicas.
“A imprimir se aprende imprimiendo”
El uso de la impresión 3D en el ejercicio de su actividad profesional convierte a estos profesores en candidatos idóneos para transmitir este conocimiento. En esta línea, Troyano destaca: “Realmente la formación se imparte por un ingeniero industrial que trabaja constantemente con la tecnología aditiva en el campo biomédico, y por un protésico que tiene gran bagaje con las nuevas tecnologías implementadas en el sector dental”.
Asimismo, en gran parte de sus formaciones cuentan con la colaboración de Rodrigo Zapata, ingeniero industrial y William Solorzano, ingeniero eléctrico-mecánico, ambos dedicados al campo de la investigación relacionado con la impresión 3D.
Por qué escoger sus cursos
La amplia presencia de estos emprendedores en la universidad, como alumnos y colaboradores, les ha hecho percatarse de que “la mejor manera relacionarse con una tecnología nueva es haciendo uso de ella”, explica Martínez. Y señala: “A imprimir se aprende imprimiendo”.
Por este motivo, en sus formaciones siempre trabajan mano a mano con los asistentes, escuchándoles e intentando solventar los problemas que estos puedan encontrarse en su día a día laboral. “Por contradictorio que parezca, las mejores lecciones surgen al tener que solventar los errores y las complicaciones que pueden surgir diariamente, donde no tendrás a un profesor para ayudarte”, cuenta el ingeniero.
“Las mejores lecciones surgen al tener que solventar los errores y las complicaciones que pueden surgir diariamente”
En estos cursos, definen, “lo prioritario no es simplemente lo estético que pueda quedar un trabajo, sino que hayas sido capaz de afrontar cualquier complicación entendiendo qué está pasando y cómo sobreponerte ello”.
En este sentido, la experiencia en primera persona es primordial, porque, como destaca Martínez, “garantiza una mayor implicación y atención, así como una mayor facilidad para adquirir el conocimiento”. El objetivo es que protésicos, odontólogos y otros interesados del sector puedan introducir esta nueva metodología en su negocio sin que suponga para ellos un contratiempo.
La impresión 3D en sus formaciones
El equipo 3Dtive lo tiene claro: “Con esta tecnología podemos tener resultados predecibles, controlables y reproducibles sin una inversión muy elevada”. Sus formaciones siempre persiguen un objetivo común: explicar las nociones de la impresión 3D aplicadas a flujos de trabajo o casos reales relacionados con el sector dental.
Además, gracias al conocimiento de los docentes, se pretende que el alumno obtenga un grado considerable de independencia a la hora de trabajar con líquidos del mercado. Esto se lleva a cabo enseñando protocolos de parametrización de resinas fáciles de aplicar para tener libertad y así, tras las formaciones, “el asistente pueda ser capaz de decidir -adecuadamente- qué líquidos trabajar y de qué marca”, cuenta Martínez.
El control del ajuste de los trabajos es otra de las prácticas más destacables dentro de cada formación, puesto que se trata de un aspecto elemental en aplicaciones estéticas o de implantología, por ejemplo.
Desde la perspectiva de ambos cofundadores, a la hora de abordar un implante, “es tan importante que un análogo no tenga holgura o que entre correctamente, sin forzarlo, como que una carilla o corona asiente adecuadamente sobre el tallado”. Y concluyen: “Todas estas variables son manipulables o corregibles si te enseñan cómo hacerlo”.